mita beutel
Sesiones individuales

Sesiones individuales

Acompañamiento vía zoom y presencial:

Reconocer tu ritmo interno y respetarse

Recordar la posibilidad de hacer de nuestra vida cotidiana una experiencia

Despertar el cuerpo olvidado

Todo es muy simple, sin complicaciones, solamente al encontrarnos ya propiciamos el espacio idóneo para que la vida se exprese. Hay tanto para descubrir e integrar.

Cuando damos espacio al cuerpo para soltarse, respirar, moverse, expresarse, sin juzgar, solo respetando la condición natural de la vida, la respuesta es simple. El cuerpo respetado por su organicidad puede sentir más de cerca la flexibilidad y bienestar.

Invitaciones para volver a tu nido: 

  • Recuerda preguntarte algunas veces: ¿Cómo está mi nido?
  • Escucha tu cuerpo y descansa en su presencia
  • Reconoce lo que necesitas
  • Date tiempo y espacio para integrar lo vivido
  • Investiga tus sensaciones corporales sin juzgarlas y acepta cómo se manifiestan.
  • Descansa entre una actividad y otra. Tan solo 5 minutos pueden ser muy reparadores.
  • Recuerda que estar atentos a los micro movimientos te pueden ayudar a vivir de manera más consciente y presente.
  • Baila con el silencio para escuchar tu propia música interior.
  • Recuerda que la alegría hace parte del camino.

No intentes salvar el mundo entero ni hacer nada grandioso.
Abre, en cambio, un claro en el denso bosque de tu vida
y espera allí con paciencia,
hasta que la canción que es tu vida
caiga en tus manos ahuecadas
y la reconozcas y la acojas.
Solo entonces sabrás cómo darte
a este mundo
tan merecedor de rescate.

Martha Postlewite

Testimonios de alumnos

"Anidar...
es espacio de compasión... es escucha y cuerpo sensible...
es el corazón que se asoma a la danza..
es volver a un refugio donde estamos todxs...
Agradecida con Mita y la vida por este espacio de ser". 

Florencia
"Para mi ANIDAR con Mita ha sido un regalo de esos inesperados que trae la vida: el regalo de reconocerme. Reconocerme en el sentido de volverme a conocer a partir del cuerpo, de saber escuchar sus sutilezas y confiar en su sabiduría innata. Y por otro lado reconocerme en el sentido de aprender a valorarme y quererme un poco más tal y como soy y siendo más consciente de esa capacidad creadora única que llevo, y llevamos todos dentro. Movimiento sagrado".  

Lola